La clonación de los periódicos digitales es un fenómeno que en los últimos meses se ha incrementado en internet; esta práctica poco ética tiene como objetivo mostrar información falsa haciendole creer a los internautas que es verdadera, ya que en dicho proceso se emulan o copia la interfaz original de un periódico digital.
En El Salvador, por ejemplo, los periódicos El Diario de Hoy y La Presa Gráfica han sido afectados por esta práctica en varias ocasiones y recientemente se conoció el caso de el periódico guatemalteco Prensa Libre, en el que por cierto, según este medio identificaron como responsable a un programador salvadoreño.
Básicamente la clonación de un periódico digital o cualquier sitio en internet comienza con la compra de un dominio en el que alguna letra le falta o le sobra, por ejemplo a laprensagrafica.com le clonaron unas noticias en el sitio laprensagriafica.com haciéndolo pasar como si fuera el sitio verdadero.
Las personas que leen rápido y no distinguen ese caracter demás, pueden ver algún enlace en las redes sociales, entrar en él, leer la noticia y creer que se trata de el sitio real. El fin de esto es casi siempre difamar a personas o instituciones para que la gente se ponga en contra de ellos o darle fama a algunas personas.
El trabajo es realizado por programadores que tienen conocimientos en programas avanzados como HTTrack que les permite copiar sitios web que luego modifican según lo que quieran mostrar.
¿Cómo saber quién clonó un sitio?
Aunque es muy difícil es posible conocer algunas pistas de la persona o personas responsables de clonar un sitio.
Una de las formas es revisando el Whois o la información del dominio en sitios como whois.com para conocer los datos de la persona que lo ha registrado.
Esta fue la forma que usó Prensa Libre para descubrir el nombre de la persona que supuestamente clonó su sitio; sin embargo el programador salvadoreño se defendió diciendo que habían tomado sus datos y los habían colocado en whois del dominio, lo cual pudiera ser cierto o no, dependiendo de la fecha en la que los modificaron.
En todo caso el registrador del dominio podría tener la información real, ya que incluso puede contratarse el servicio de Whois privado para que nadie pueda ver los datos del propietario del dominio.